Buenas otra vez, esta vez nos desplazamos Lucia y yo a una quesería de cabra, de las pocas que hay en la provincia de Valladolid y además en mi tierra, en mi pueblo de toda la vida, Laguna de Duero. Nos encontramos con una joven de 23 años, con una calidad humana excepcional y de esas personas que después de hablar con ellas, vuelves a tener esperanza en el mundo que nos rodea, Celia. Nos cuenta con una emoción brutal como esta ella gestionando la quesería que ya montó su padre, Juan “el cabrero” hace unos años de forma profesional , pero que lleva más de 20 años haciendo particularmente quesos artesanos de alta calidad. Nos ponemos a charlar de todo, de la vida, de los jóvenes, de lo que queremos y cómo lo queremos y eso nos hace a los dos tener aún más cosas de las que hablar…Después de media hora hablando y disfrutando de una conversación apasionante, me enseña los quesos y me dice las variedades que tiene, y también los yogures que después de comerme todos doy fe que son unos de los mejores yogures que he probado en mi vida, eso sí la primera cucharada que te metes en la boca te explota, casi como quien dice te metes una cabra en la boca, algo increíble si te gusta el queso. Celia me dice que las cabras son suyas y ellos mismos hacen todo el proceso, desde la alimentación de las cabras que las tienen muy mimadas y a cuerpo de rey hasta todos los procesos que se desarrollan en la granja y en la quesería, un placer ver a gente tan joven haciendo cosas tan grandes e importantes y con la cabeza tan despejada y con tantas ganas de hacer y se seguir creciendo. En esta gran quesería artesanal tenemos 4 tipos de quesos de cabra, a cual mejor, desde un queso tierno, excelente y muy fácil de comer hasta un queso añejo que esto ya es para profesionales, este queso pica es una auténtica maravilla. Si te gustan los quesos de cabra esta es tu oportunidad para comer algo excepcional, algo hecho con amor del de verdad del que se ve muy poco, amor por el trabajo , amor por una vida completamente distinta a la que nos han enseñado a tener algo que es tan especial como la propia Celia, de verdad que me quito el sombrero ante sus quesos y me quito el sombreo ante la calidad humana de esta mujer. Queso tierno, fácil de comer y con un sabor brutal, queso semi, un poco más fuerte pero una autentica pasada, queso curado, este queso ya son palabras mayores, toda una experiencia en quesos de cabra, y el más potente que este es como una bomba el queso añejo, solo para los que les gustan las emociones fuertes y los quesos que no se te quitan de la cabeza en la vida. Nos fuimos Lucia y yo con una sensación espectacular ya no solo por los quesos y la quesería que tenía tan cerca y no conocía, sino por haber conocido a esta chica / mujer y haber comprendido que hay futuro y esperanza en las nuevas generaciones, ole, ole y ole. Una quesería que con el tiempo se va a convertir en un referente a nivel mundial y sino tiempo al tiempo, quesos excepcionales, trabajo excepcional y humanidad excepcional.